Los frutos secos en los países cálidos.
En el hemisferio norte las familias que esperan la Navidad y el Año Nuevo lo hacen en un ámbito invernal donde en una gran parte de los países nieva y hiela. Es lógico que durante la época invernal las comidas suelan ser más calóricas que durante el estivo, razón por la cual es bastante popular el consumo de frutos secos y comidas de gran porte calórico.
¿Pero qué sucede en los países cálidos, tropicales o con aquellos que en ésta época del año gozan de los días calurosos del verano? Pues el calor de los días sugiere ingerir mayor cantidad de líquido y comidas menos calóricas pero igualmente nutritivas. Como parte de las costumbres traídas por inmigrantes, los frutos secos se han expandido a lo largo de todo el globo y su consumo para las fiestas es mayor.
Hay que tener en cuenta que los frutos secos poseen un gran nivel calórico por gramo y que su ingesta en demasía puede ocasionar el aumento de peso de forma sustancial. Tener en cuenta que cada cien gramos se aportan:
Almendras = 500 kcal
Avellanas = 625 kcal.
Nueces = 650 Kcal.
Todas ellas ofrecen un alto nivel de lípidos, mayor incluso que lo que pueda aportar 100 gramos de carne de cerdo. Se las debe ingerir de manera moderada pero periódicamente, dado que son fuente de varios otros nutrientes muy buenos tanto para el funcionamiento metabólico como para el neuronal.
domingo, 12 de diciembre de 2010
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